UN FRAGMENTOS DE LA CARTA DEL TENIENTE CORONEL SUECO FREDRIK PETRÉ A SU TIO SAMUEL NIKLAS CASSTRÖM. FECHADO EN LIMA, 10 DE ABRIL DE 1825, SEÑALA QUE LA SANTA ALIANZA EUROPEA PLANEABA RECONQUISTAR LA AMERICA DEL SUR A SUS DOMINIOS IMPERIALES Y LA AMENZA QUE REPRESENTABA EL LIBERTADOR "SIMON BOLIVAR" Y SUS IDEAS REVOLUCIONARIAS QUE CONTAGIABA EL VIEJO MUNDO (EUROPA), REPRESENTANDO UNA VERDADERA AMENAZA A LOS PODERES MONARQUICO QUE VENCIERON A NAPOLEON BONAPARTE.
La carta elogia al gran Bolívar señalando que ama y protege a los extranjeros con alma y corazón. Quiero presentar un ejemplo;
... El consulado de esta ciudad había dictado un decreto, invocando viejos reglamentos, según el cual todos los extranjeros debían poner término de inmediato a todas las actividades de comercio minorista y cerrar sus tiendas. Antes de que la ordenanza entrase en vigor, el Libertador, que ahora está constantemente presente en el sitio del Callao, fue informado acerca de ella. Al instante se mostró indignado y se expresó así: “Nosotros no somos turcos aún. Aquel que carezca de las ideas de la libertad, será siempre un patriota inútil y debe disponerse a viajar para sacrificar el tiempo que sea necesario en las tierras de Colombia” (es decir: aprendiendo allí los principios de la libertad). Por último mandó la siguiente nota al presidente del consulado: “Si el Perú quiere llegar a ser libre, la liberalidad del gobierno debe extenderse incondicionalmente a los extranjeros, y si ustedes carecen de conocimientos sobre las leyes, yo les enviaré una biblioteca”. Al día siguiente estaban las tiendas de los extranjeros abiertas como antes…
Luego señala, ....como se sabe, la batalla de Ayacucho decidió la completa derrota de los españoles y el dominio absoluto de Sud-América por parte de los patriotas, la fortaleza del Callao con 1.500 hombres de guarnición se ha mantenido tercamente en sus posiciones. El congreso peruano, reunido en forma permanente, suspendió sus sesiones por tres días, después de haber obligado, unánimemente, al General Bolívar, a gobernar y dirigir sus asuntos en calidad de Salvador y Padre del Perú, por lo menos por un año. El congreso concedió al General un millón de piastras (pesos) como una prueba de gratitud, pero el General respondió: “Yo sería ruin si aceptase del Perú lo que me he negado a aceptar de Colombia, y estoy completamente recompensado con la medalla que el congreso ha acuñado en mi honor”. Cuando el mando supremo fue entregado en manos del Libertador, se levantó un sacerdote y le habló de esta manera: “Si el General Bolívar nos traiciona, entonces juraremos no confiarnos jamás de los hombres”, a lo cual siguió esta respuesta: “El General Bolívar no tiene sino una sola palabra”. Ayer llegó un rumor a oídos del General, según el cual ya habría tenido lugar la declaración de guerra por el lado francés contra toda la América del Sur. El General expresó entonces: “Una sangrienta guerra espera a la América del Sur, si la Santa Alianza emplea toda su capacidad de acción. Es ridículo, dijo, querer disputar la libertad de millones de seres, después de que ellos, protegidos por la mano de la Providencia, lograron sacudirse el yugo de la esclavitud, organizarse independientemente y aprender a conocer sus propias fuerzas”. Después de 14 años de sacrificios los patriotas pueden, creo yo, con su padre y superior a la cabeza, realizar todo lo que desde el punto de vista civil y militar pueda servirles de provecho. Bolívar, quien quizá es más grande que el mismo gran Washington, es, me atrevo a decirlo, completamente digno de la ilimitada confianza que se le ha otorgado.
¿Qué Fue la Santa Alianza?
La Santa Alianza. Fue un alianza militar entre Rusia, Austria y Prusia creada en el Congreso de Viena en el año 1815 después de la derrota de Napoleón. A instancias de zar Alejandro I de Rusia, se firmo un acuerdo entre los tres monarcas europeos el 26 de septiembre de 1815 en París. Tuvo como objetivo primordial el mantenimiento del statu quo del absolutismo en Europa tras la caída de Napoleón e impedir el surgimiento y propagación de movimientos revolucionarios o liberales.
Si bien en un principio su fundamento era meramente religioso, en noviembre de 1815 el canciller de Austria, Klemens von Metternich, reemplazó el tratado original por uno de corte netamente político en noviembre de 1815 con la inclusión de Inglaterra (por lo cual se le llamó la Cuádruple Alianza) y Francia (en 1818), la cual buscaba imponer el absolutismo como política de Estado ante cualquier tentativa liberal en Europa. Metternich dijo al respecto: "Un espíritu de innovación o, mejor dicho, de desorden amenaza la calma de todos los Estados. Es preciso ponerle un instinto de conservación, buscar la consolidación y fortificación de las instituciones que exigen… antiguas o modernas, lo mismo da, con tal de que tengan un origen legítimo que deben ser mantenidas a todo trance".
LA SANTA ALIAZA Y EL IMPERIO DE BRASIL PLANEAN CONQUISTAR LA AMERICA DEL SUR
La Santa Alianza, estaba en conocimiento de los acontecimientos en la América española, y quienes eran los lideres que que estaba gestando su independencia, siendo Simon Bolivar el mas resaltante por sus logros, ideas y vision de un mundo multipolar.
Simón Bolívar, José de San Martín, Bernardo O’Higgins y otros líderes militares combatían contra los ejércitos realistas de España para conseguir la independencia de los países suramericanos. Poco a poco, consiguieron victorias resonantes: San Martín y O’Higgins vencían a los realistas en Maipú (Chile, 1818), Bolívar hacía lo propio al norte en Boyacá (Colombia, 1819) y Carabobo (Venezuela, 1821). Con la victoria de los patriotas, al mando del general Sucre, en Ayacucho (Perú, 1824) sobre los realistas, al mando del virrey La Serna, se aseguraba la independencia de la América del Sur.
Ya en 1825, con la independencia asegurada, se escucharon fuertes rumores acerca de una invasión planeada por la Santa Alianza, y que tendría como objetivo el istmo de Panamá. Por otra parte, las continuas expansiones del territorio del Imperio del Brasil hicieron temer a Bolívar y a varios políticos argentinos de que Brasil estaba en connivencia con la Santa Alianza.
La idea de una posible conspiración del Imperio brasileño con la Santa Alianza europea en contra de las repúblicas sudamericanas está presente, entre otros testimonios documentales, en una carta de Bolívar al general Francisco de Paula Santander, fechada en Puno (Bolivia) el 6 de agosto de 1825, que decía lo siguiente:
"Hoy he recibido comunicaciones de Buenos Aires, dirigidas al general Sucre, por las cuales sabemos finalmente que la misión de Buenos Aires del general Alvear y el doctor Díaz Vélez trae, entre otros objetos, la invitación formal y expresa de hacerle la guerra al Brasil, de acuerdo con Buenos Aires, que está haciendo esfuerzos por recobrar la Banda Oriental y Montevideo. Como este negocio es gravísimo, no me dejaré arrastrar de pronto ni por la gloria ni por las lisonjas. Desde luego, yo no puedo disponer de las tropas de Colombia sin consentimiento de su gobierno. Por lo mismo deseo que V. consulte al Congreso y a los agentes ingleses sobre el modo con que Inglaterra vería una guerra de nuestra parte con el Brasil. A primera vista no parece útil más que a Buenos Aires, pero como la Santa Alianza puede, con el tiempo, aprovecharse del Brasil para atacarnos, será muy útil consultar a la Inglaterra de antemano sobre esta materia (...)".
EL PODER MILITAR DE LA SANTA ALIANZA SE IMPONE EN EUROPA
En España, la revuelta de Rafael del Riego (1820) trajo el Trienio Liberal (1820-1823), donde los liberales restauraron la Constitución de Cádiz de 1812 e hicieron varias reformas. Fernando VII invocó a la Santa Alianza para auxiliarlo, y Francia envió un ejército, denominado “Los Cien Mil Hijos de San Luis”, al mando del duque de Angulema, para reponer el orden absolutista del monarca español.
BOLIVAR TOMA ACCIONES MILITARES Y DIPLOMATICAS CONTRA LA SANTA ALIANZA.
Ante esto, y teniendo conocimiento de las acciones en España por el ejército de los Cien Mil Hijos de San Luis, Bolívar toma acciones militares y diplomáticas. Las primeras consisten en enviar un contingente militar al mencionado Istmo, y nombrar al general Antonio Valero de Bernabé como Jefe Militar del Departamento del Istmo (actual Panamá). Las segundas consistieron en convocar a un Congreso Anfictiónico (es decir, formado por naciones de un mismo origen, idioma y cultura, en este caso las de Hispanoamérica), a celebrarse en la ciudad de Panamá, entre junio y julio de 1826.
A este congreso asistieron diplomáticos de la Gran Colombia, Perú, México y la Federación Centroamericana (que actualmente son casi todos los países de la América Central). Como observadores asistieron delegados de Gran Bretaña y los Países Bajos. El proyecto de este Congreso era formar una confederación de países para protegerse de intromisiones extranjeras, además de colaboración mutua. Bolívar opinaba acerca de la confederación lo siguiente: “La Santa Alianza será inferior en Poder a esta Confederación, siempre que la Gran Bretaña quiera tomar parte en ella como miembro constituyente. La Gran Bretaña alcanzaría, sin duda, ventajas considerables por este arreglo”.
Es así como en carta al General Francisco de Paula Santander (vicepresidente de la Gran Colombia) denomina el Congreso de Panamá como Liga Santa en contraposición a la Santa Alianza; y la conveniencia de contar con mecanismos propios para resolver eventuales disputas entre nuestras naciones.
El resultado de todas estas acciones fue disímil: no hubo la esperada (y temida) invasión de la Santa Alianza, y las decisiones tomadas en el Congreso de Panamá no surtieron efecto, pues nunca fueron aplicadas por los países que lo suscribieron. Sin embargo existen pruebas documentales que estaremos revelando en otros articulos donde se evidencia resoluciones diplomaticas y conflictos entre los imperios Europeos, en especial Inglatera, donde se aprecia la intencion real de Conquistar la America del Sur recien liberadas por nuestros Heroes Libertadores.