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12 de abril de 2020

UNA "BESTIA DE LOS MARES" SE PUDO VER DESDE SAN FELIX


 En 1968, se deslizó a seis metros de la orilla del Orinoco, el Hovercraft, un aerodeslizador británico de diez toneladas que pudo salvar felizmente los raudales que impedían la navegación corrida por el Río Padre. En su recorrido paso frente al Malecon de San Felix y el Puerto de Ciudad Bolívar. 

Lo ultimo en tecnologia para la epoca en relacion a botes rapidos. Un aerodeslizador, también designado con el término inglés "hovercraft", es un vehículo que se desliza al lanzar un chorro de aire contra una superficie que se encuentra debajo de él; esto genera un colchón de aire o cojín de aire, que le permite, en principio, moverse sobre cualquier superficie horizontal lo suficientemente regular, como llanuras, sobre el agua, la nieve, arena o hielo, sin estar propiamente en contacto con ella. Algunos aerodeslizadores pueden desplazarse a velocidades superiores a los 150 km/h.

El inventor del aerodeslizador u Hovercraft es el ingeniero británico Christopher Sydney Cockerell en el año 1955 en la ciudad de Londres. Se patentó el 12 de diciembre de 1955 con el número de patente GB854211. Christopher S. Cockerell (1910-1999), un ingeniero eléctrico que trabajaba para Marconi, se fue a Suffolk para convertirse en constructor de barcos. Se interesó por la idea de hacer barcos más rápi­dos reduciendo la fricción, y preguntándose por la lubricación del aire entre el casco y la superficie del agua percibió la necesidad de una capa más gruesa de aire. Los Hovercraft SR, de clase Mountbatten, operaron en el Canal de la Mancha entre 1968 y 2000. Era una auténtica bestia de los mares (¿o los aires?) en muchos sentidos: por su tamaño, capacidad y potencia. Aunque la tecnología de estos artefactos todavía se usa, por desgracia llegó un momento para el Concorde de los Mares en que ya no resultaba tan rentable como otras formas de transporte al igual que le sucedió al Concorde del aire. Los seis que se fabricaron y se fueron renovando década tras década con total dignidad acabaron desapareciendo.
El Hovercraft había partido el día 10 de abril con un equipo de geógrafos, investigadores, escritores y fotógrafos británicos, desde el brasileño puerto de Manaos sobre el río Amazonas, remontando el Río Negro, luego el Orinoco a través del Brazo Casiquiare hasta llegar a Ciudad Bolívar y finalmente San Félix en recorrido de 3.200 kilómetros.
Esta expedición organizada por “The Geographical Magazíne”

EL AERODESLIZADOR HOVERCRAFT SRN6 EN AGUAS DE NUESTRA GUAYANA (1968)

Aproximadamente hace 52 años, los guayaneses y bolivarenses fueron testigos de una expedición que inicio desde el Amazonas (Brasil), ingresando por el Caño Casiquiare y el Orinoco a Venezuela en 1968. Un grupo británico de veinte personas que patrocinadas por el Felipe de Inglaterra, el National Geographic Magazine, el gobierno de Inglaterra, la Compañía Shell de Venezuela y Brasil, que suministraban el combustible usado por el aerodeslizador Hovercraft, aparato en que se movilizaba el selecto grupo interesado en los caudalosos ríos amazónicos y posibilidades de uso de la novedosa embarcación como medio de usos diversos en los recursos hídricos para la navegación en la zona.

El recorrido de la expedición partió de Caño Manaos, en Brasil, pasó a San Carlos de Rio Negro, donde lo encontramos al cabo del recorrido de 700 millas a una velocidad promedio de 45 millas por hora, y habiendo empleado 17 días. Posteriormente se dirigieron a San Félix. en el estado Bolívar, lo que significó que cuando los encontramos en territorio venezolano, aun les falta por recorrer unas 800 millas incluyendo el paso los por rápidos al sur de Puerto Ayacucho, tal vez el mayor obstáculos. Enviados por el diario El Universal, estuvimos en el grupo que en San Carlos de Rio Negro, con funcionarios de la Shell de Venezuela encabezados por don José Antonio Iacocipini Zárraga y varios periodistas, fueron trasladados desde Caracas tempano en la mañana, en un avión De Havilland Heron de la Cía. Shell de Venezuela al mando del capitán Ricardo Alfonzo Vaz. Al terminar la expedición del aerodeslizador Hovercraft SNR6, debía concluir en La Guaira e Higuerote, donde se expondría en exhibiciones comerciales toda vez que se trataba de un producto innovador en auge que daba en sus distintas versiones ya daba muestras de ventajas civiles como militares entre otras el paso del Canal de la Mancha como servicio regular de alta velocidad y cómodo. 

Algunos de los integrantes de la expedición era el capitán Grabam Clarke, el copiloto Stuart Sirad, el mecánico John Huyland, M. J. Eden, biógrafo del Bedford College; C. Gorinsky, del etnobotánico del Saint Barts Medical School; D. R. Harris, biógrafo del University College; J. B. Thornes, geomorfólogo del London School of Economics; David Smithery, administrador de la expedición; cinco especialistas de la BBC de Londres, quienes están realizando una película de 50 minutos de duración, a colores y con sonido directo. La expedición dirigida por Michael Eden, de 31 años, profesor de geografía en la Universidad de Londres, duró un mes. Al entrar la nave en territorio venezolano, frente a la Piedra del Cocuy, embarcaron el doctor Ernesto Medina, ecólogo de la Escuela de Biología de la Universidad Central de Venezuela, el comandante Evelio Colmenares Leal, de Fuerzas Armadas de Cooperación y el capitán Jacobo Yépez Daza, del Ejército venezolano. La expedición, que será dirigida por Mr. Michael Eden, de 31 años, profesor de Geografía en la Universidad de Londres, durara un mes y sus hallazgos serán analizados por Varios organismos universitarios y puestos a disposición de los gobiernos interesados.



El piloto del aerodeslizador era Don Más, de la British Hovercraft Corporation, quien tendrá como asistente a Mr. Graham Clark, de la Hovercraft Ltd., y al Capitán Stuart Syrad, de la Real Infantería de Marina. A todos ellos se agregaron tres venezolanos; el teniente coronel Colmenares, ingeniero forestal de las FAC; el capitán Yépez, geógrafo de las Fuerzas Armadas, y el doctor Medina, botánico de la UCV. El propósito principal de la expedición fue una investigación científica de la región sur –además del espacio de Brasil navegado- de Venezuela, incluyendo elementos de sedimentología, para conocer mejor las causas que originan la erosión. También una investigación ecológica, o sea, el efecto o influencia del ambiente sobre los animales y las plantas. Se estudiaba también los cultivos indígenas haciendo énfasis en aquellos que circundan la sabana, y se ensayó un equipo electrónico que permitía obtener información de las formaciones en los lechos de los ríos, a medida que el Hovercraft iba navegando. 

Graham Clarke. En octubre del 2007, el diario The Telegraft rindió homenaje a Graham Clarke, quien había muerto a los 77 años. Se trataba de un ex combatiente en la Guerra de Corea como piloto del Ejército de Aire que luego, en 1968, “puso a prueba un aerodeslizador en el peligroso Negro y Orinoco en América del Sur… la necesidad de atravesar los rápidos traicioneros, lo convirtió en uno de los viajes más difíciles jamás llevadas a cabo por un aerodeslizador”. El viaje tenía por objeto demostrar que la nave el aerodeslizador inglés SRN6 debía demostrar a la corporación británica fabricante, que podría viajar con éxito 2.500 millas entre Manaos, en Brasil, y Puerto de España, Trinidad. La ruta de Clarke el río a través del Casiquaire y el Orinoco. La navegación era por cartas aeronáuticas y un guía local, que también había establecido los puntos de aprovisionamiento de combustible en las paradas programadas con antelación.

Graham Clarke (a la izquierda) al mando del aerodeslizador hovercraft SRN6

Había dos riesgos principales: los rápidos de San Gabriel en el río Negro, y los Maipures y rápidos de Atures, justo por encima de Puerto Ayacucho, en el Orinoco. Mientras que el primero no representa un problema, los que en el Orinoco requieren un reconocimiento aéreo con el fin de seleccionar un paso a través de unas 40 millas de rápidos. La negociación en las últimas etapas exigieron las habilidades y la experiencia de Clarke, ya que la nave no podía viajar a menos velocidad si era para evitar problemas como el de chocar contra las rocas. El viaje exitoso fue el tema de un documental de la BBC, El Último Gran Viaje en la Tierra, y de un libro del mismo título por Brian Branston, líder del equipo de la BBC.

Roland Graham Clarke nació el 19 de octubre de 1929 en Carlton, Nottingha, En 1960, Clarke dejó la Marina para ocupar la cría de cerdos en la Isla de Wight, que le mantuvo ocupado durante seis años hasta su problema de espalda hizo necesario un cambio de empleo. Después de conocer a Christopher Bland, uno de los fundadores de Hovertravel, se convirtió en un piloto del aerodeslizador en el servicio de ferry entre el continente y Ryde. A su regreso de la expedición de la National Geographic Clarke fue "prestado" por Hovertravel al aerodeslizador Corporación Británica para ayudar en la India en sus esfuerzos para controlar el contrabando de oro. Él enseñó a pilotos de la Marina de la India a conducir y navegar el aerodeslizador usad como patrulla.Fue nombrado director general, y luego un director, de Hovertravel. 


BIBLIOGRAFIA:

Alfredo Schae
https://museodeltransportecaracas.blogspot.com/2016/08/1968-el-aerodeslizador-hovercraft-srn6.html.
Américo Fernández
http://orinocando.blogspot.com/2018/08/el-hovercraft-o-aerodeslizador-en-el.html?spref=pi

1 comentario:

Daniel dijo...

Guayana es, Guayana es, Guayana es.....

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